28 enero, 2012

Salzburgo, Mozart y Sonrisas y lagrimas

En este viaje había pocos sitios a los que quisiéramos ir sí o sí. ¿Y si pasamos por Viena? vale. ¿Innsbruck? venga. Pero a Hallstatt queríamos ir de todas todas. Así que por conveniencia geográfica acabamos en Salzburgo y la verdad es que no llevamos una grata sorpresa. Gracias en parte a que tampoco esperábamos nada especial. Además conseguir llegar a la ciudad ya empezó siendo divertido.



Estábamos en el tren que iba desde Munich a Salzburgo apunto de llegar a la penúltima parada antes de nuestro destino cuando suena por la megafonía del tren un señor hablando en alemán un buen rato. A nosotros nos daba igual, no entendemos el alemán más allá del hola, adios, gracias y por favor, además siempre suenan avisos de cual es la próxima parada, del tiempo que hace en el destino y cosas así. Nuestra estrategia cuando suenan avisos es fijarnos en la cara de la gente, porque quizás no entendamos si dicen " Es ist ein Verrückter im Zug Sie wollen uns alle töten. "(google translate ^.^) Pero si la cara de la gente cambia, entra en pánico o yo que se, pues te puedes hacer una idea de lo que pasa. En este caso, aparte de que el señor estuvo hablando un buen rato, cosa que ya nos hizo sospechar, la gente iba diciendo "oohh" y por su cara parecía que no les hacia mucha gracia lo que estaban escuchando.  Preguntamos a un chico que había a nuestro lado y nos dijo (en inglés, claro) que habia algún tipo de emergencia médica y que el tren paraba en la siguiente parada (Freilassing) y se daba media vuelta para Munich O.O Así que estábamos a una parada de Salzburgo pero sin tren.


Como teníamos el billete de interrail pues como que nos daba igual, si acaso perdiamos algo de tiempo, pero nada más. Preguntamos a un maquinista, este no hablaba mucho inglés, no nos dijo que había pasado pero le sacamos que su tren no iba para Salzburgo, it's something. Buscamos otro tren, encontramos otro que llevaba allí parado un buen rato pero que si que iba a Salzburgo, así que nos subimos, y fue hacerlo y ponerse el marcha en tren (que suerte). Volvimos a preguntar si sabían lo que había pasado y nos dijerón que había ocurrido algún accidente o algo así y que todos los trenes a Salzburgo estabán retrasados...Creo que nunca sabremos que es lo que pasó, pero despúes de todo conseguimos llegar a la ciudad!



Salzburgo se encuentra en un valle, rodeado de altas montañas y divida en dos por el rio Salzach. Conocida en parte por ser la ciudad natal de Mozart, aquí encontrareis su casa museo donde nació (y vivió hasta los 17 años) y como parece que esta no era suficiente también tenéis la casa museo donde vivió. Por otro lado, si habéis visto la película "Sonrisas y lagrimas"(Sound of Music) os sonarán muchos de los rincones de la ciudad ya que muchas de las localizaciones de la película han sido grabadas aquí. Hay numerosos tour que recorren estos lugares.






Algunos puntos de interés:

  • La fortaleza (Festung Hohensalzburg). Sin duda el icono más destacable de Salzburgo. Domina la ciudad desde lo alto de la montaña. Desde lo alto ofrece una vistas magníficas de la ciudad, con el río y las montañas al fondo. La entrada a la fortaleza son 7.40€ y si subimos con el funicular son 10.50€. Nosotros subimos en el funicular, porque nevando y con el frío que hacía subir andando no iba a ser un plácido paseo de domingo.


  • La catedral. Toda gran ciudad (católica) tiene su catedral y Salzburgo no iba a ser una excepción. De estilo barroco, con un interior muy impresionante. A mi me llamo la atención una especie de balconcitos que había por toda la parte superior de la catedral, como si de un teatro se tratara.

  • Mirabellgarten es un bónito jardín que seguramente luzca más en primavera con los colores de las flores, que en invierno con todo cubierto de nieve y ni una flor a la vista.
  • El cementerio de la iglesia de San Sebastian, es un lugar tranquilo para descansar del bullicio que rodea a todo el casco antiguo. Aquí podemos encontrar los restos de la familia de Mozart, pero para "verle" a él hay que ir hasta Viena.


  • El monasterio de los Capuchinos(kapuzinerberg). Si nos desviamos en la calle Linzer Gasse hacia el monasterio, además de subir una buena cuesta podremos disfrutar de unas bonitas vistas de la ciudad.
  • La Residenzplatz, localizada en el centro histórico de la ciudad, está rodeada por la Alte Residenz, la Neue Residenz y la catedral. En centro de la plaza hay una bonita fuente, o eso dicen, porque en invierno tapan algunas fuentes y estatuas para que no se estropeen por las heladas, así que lo que vimos fue esto:


En cuando al transporte, os podréis mover por todo el centro sin necesidad de coger ningún autobús ya que todo está relativamente cerca.

Por último una recomendación. Aunque los pretzels son típicos de Baviera, en Salzburgo encontraréis muchos puestecitos como el de la foto, no dejéis de probar el pretzel original, los demás no tienen nada que ver, simplemente les han dado esa forma. Y si se acompaña con una cerveza rubia (Stiegl) está todavía más bueno.













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